Un sublime Di María asalta el Principado - Futbol - Noticias de Maracaibo

Ángel Fabián Di María es uno de esos jugadores que debería ser eterno. El rosarino, que venía de marcar cinco goles en los dos últimos partidos del Benfica, se echó a las águilas a la espalda y decidió, con dos asistencias en los minutos finales, un duelo que tuvo absolutamente de todo.

Cinco goles, otros dos anulados, una roja y una nueva carta de presentación de jugadores como Kökcü, Aktürkoglu, Akliouche y Ben Seghir, autor del 1-0 para el Mónaco a los 13 minutos. Trubin rechazó el primer intento de Vanderson y Golovin, muy atento, recogió el rechace y asistió al joven extremo marroquí, que se estrenó en competición europea.

Majecki, portero local, mantuvo a los suyos con ventaja durante el primer tiempo, pero nada pudo hacer para evitar el 1-1, obra de Pavlidis tras el paso por vestuarios. El griego no desaprovechó un regalo de Navidad anticipado de Caio Henrique y dio el pistoletazo de salida a 10 minutos locos, en los que el serbio Rade Obrenovic invalidó un tanto por equipo (a Akliouche y Alexander Bah) y expulsó a Singo por doble amarilla.

Pero lo mejor estaba por llegar. Pese a su inferioridad numérica, el Mónaco logró adelantarse nuevamente gracias a un tanto de Magassa, que había salido de refresco, pero terminó sucumbiendo ante un sublime Di María, asistente en los goles de Arthur Cabral, en el 84’, y Amdouni, cuatro minutos después.

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