El empate en Vigo ante el Celta (2-2) en un partido que el Barça ganaba 0-2 en el 84′, unido a la derrota en Anoeta ante la Real Sociedad (1-0), centró la comparecencia de Hansi Flick en la previa del choque de la quinta jornada de la Champions League ante el Brest que se juega este martes a las 21 horas en el Estadi Olímpic Lluís Companys de Montjuïc.
«Tenemos un equipo joven, el más joven en la Liga y no siempre es una autopista, hay que tener cuidado en determinadas situaciones durante los 90 minutos. Con 0-2 a favor y con la roja teníamos que haber defendido mejor de lo que lo hicimos. Siempre queremos jugar y atacar pero a veces es suficiente con controlar el balón y defenderse bien. En la Liga hay partidos de fuera de casa muy duros, las aficiones de fuera me gustan porque crean una atmósfera muy buena y eso también se nota», señaló sobre lo sucedido en Balaídos.
Pese a esos dos pinchazos, Flick mantiene el optimismo: «Siempre pienso en positivo, es lo que dije, es un equipo joven y durante la temporada es normal tener algunas situaciones así, para mí lo importante es aprender de ello. La calidad de los jugadores es muy alta y tenemos que demostrarlo en el campo, y lo queremos empezar a demostrar mañana, pero el proceso de este equipo tan joven es parte del fútbol. Seguimos liderando la Liga, aunque con menos ventaja, pero cualquier equipo querría este camino».
Añadió que «seguimos nuestro camino, es nuestro camino y todos estamos bien con ello, los jugadores lo saben, saben dónde tenemos que mejorar, lo hemos hablado y tenemos confianza en los jugadores. Somos un equipo joven que lo está haciendo muy bien, en los últimos partidos no tanto pero podemos aprender de ello»
No cree el técnico alemán que su equipo haya bajado el tono físico con cierta lógica tras un inicio de temporada tan portentoso: «Tenemos el mismo nivel y los mismos datos que los partidos previos, no es cuestión de físico, se trata más de no cometer errores, hay muchas cosas que podemos hacer mejores con balón y sin, y en eso nos centramos». En ese sentido, la presión alta sí ha empeorado: «Por supuesto que cuando recuperamos el balón a veces es mejor controlarlo y algunas veces sólo queremos marcar el siguiente gol y eso no es posible, especialmente fuera de casa, y eso tenemos que aprenderlo, pasar atrás y empezar de nuevo, eso es lo que hay que hacer».
En Vigo se quejó de la falta de confianza con el balón y ya ha tomado medidas para reforzarla: «Para nosotros es importante que los jugadores sepan que son buenos, que tienen calidad y que tienen que seguirnos. Queremos enseñarles que deben jugar juntos, estar bien relacionados dentro del campo. Es increíble ver cómo pueden jugar pero hay que trasladarlo al partido y en eso nos centramos».
Ya sobre el rival europeo, avisó que «el Brest lo está haciendo muy bien en los partidos previos de Champions, tiene diez puntos y ya vimos lo que hicieron en Salzburgo. Son un buen equipo y nos tenemos que centrar en este partido y es lo que vamos a hacer, nuestro objetivo es ganarles. Lo importante es ganar y nos centramos en eso en el partido de mañana, no en un resultado concreto. Para nosotros será muy importante tener el control del balón y finalizar los ataques para conseguir los tres puntos».
Tras avanzar la baja de Balde por su molestias lumbares, habló de la ausencia de Lamine Yamal, a quien espera ya para el próximo fin de semana «Lamine tiene una calidad que te hace controlar el balón pero también hace que el rival nos de más espacio, pienso y espero que sea el último partido que se pierde porque hoy estaba muy bien pero tendremos que esperar. Espero que el sábado sea una opción, quizá desde el banquillo, pero ya veremos».
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