No le importó el frío, fue la única futbolista que vistió manga corta. Como si fuera escandinava. Pero no, nació en Lisboa. A sus 22 años, Kika Nazareth vivió su primera gran noche como azulgrana. La delantera, que llegó procedente del Benfica este verano, va cogiendo mecanismos y adaptándose cada vez más al cambio que supone llegar al mejor equipo del mundo. Poco a poco va superándose y ayer vivió su primera gran noche como culé. Ante el St. Pölten marcó los dos primeros goles y asistió a Alexia en el cuarto, el tanto que cerraría la goleada ya en el segundo tiempo.
“Los goles son importantes, pero lo mejor es la victoria y que hayamos jugado bien. Hemos mostrado nuestra personalidad”, comentó la portuguesa en declaraciones a ‘Esport3’ una vez acabado el encuentro. Aunque más allá del doblete, se quedó con la asistencia a Alexia en su gol 200. “Es un privilegio ser parte de esta historia. Es un partido para recordar, sí. Todos los partidos de Champions, lo son, pero este es especial por los goles y por la asistencia a la Reina”, declaró.
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Kika, que bromeó con sus clases de catalán y aseguró que acabaría la temporada dando una entrevista en esta lengua, se centró para hablar de lo que queda en Champions. Y lo hizo con ambición. “Tenemos dos partidos más, sabemos de la calidad del Manchester City, también del Hammarby, pero tenemos que ganar los dos partidos. Somos el Barça”, recordó la joven delantera.
Kika Nazareth ya suma 4 goles en su primer curso como azulgrana: 3 en Champions League y otro en la Liga
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