Golazo de Valverde para sacar un valioso empate ante el Brasil de Raphinha - Futbol - Noticias de Maracaibo

Uruguay se pareció más al de sus orígenes que al de Marcelo Bielsa. Fortaleza defensiva, dientes apretados, gran actuación de los centrales Josema Giménez y Mathias Olivera, partido magnífico de Rodrigo Bentancur en el medio, hasta que se fundió y un golazo, con tipo perfecto desde fuera del área de Fede Valverde.

Brasil fue el Brasil actual. Con figuras relevantes, de gran calidad técnica, el azulgrana Raphinha; Vinicius, de mal primer tiempo y buen complemento; el joven Savinho, peligroso cuándo partía desde la derecha y encaraba hacia el centro; Luiz Henrique , Martinelli; pero con un gran déficit para capitalizar en lo colectivo la riqueza individual, y fundamentalmente, para volver a sentirse el Brasil de antes, el que arrollaba y ganaba casi siempre.

El resumen terminó siendo un partido de posesión de balón verdeamarelho, pero de resultado supervalioso para Uruguay, la celeste se ilusionó con más cuándo la conquista de Valverde, pero otro muy buen tiro, esta vez de Gerson, puso la igualdad a los pocos minutos.

El local dominó la primera parte, con muy buen fútbol en los primeros 20 , pero detonó con su incapacidad para el gol. El 0-0 era negocio para los celestes.

Bielsa decidió la salida de Darwin Nuñez para el complemento, dando ingreso al jugador del Amèrica de Mèxico, Rodrigo Aguirre. Uruguay ganó en peligrosidad y así llegó la apertura. Pero la furia ofensiva norteña en los siguientes instantes del encuentro tuvieron su premio en el empate de Gerson.

El DT Dorival procurò todas las variantes posibles, pero no pasó del 1-1. Uruguay cerró caminos, y con su viejo estilo, se llevó el punto de Bahía.

Brasil no pudo con los charrùas ni en la ida en Montevideo, ni en la vuelta en su tierra. Cerró el 2024 con la imagen errática de un equipo que no encuentra su destino.

Uruguay salió del mundo de las sombras, en el que había caído en setiembre y octubre, con cuatro partidos sin convertir.

La victoria del viernes ante Colombia, con tanta angustia como alegría final, y este empate en el nordeste brasileño, le devuelven la confianza. Y ahora, aún con seis fechas de las Clasificatorias Sudamericanas por jugar, y sin que la aifrmaciòn siguiente tenga certeza matemática, la igualdad de visitante ante Brasil, lo pone en la Copa del Mundo del 2026.