El Washington Spirit femenino entrenado por Jonatan Giráldez se clasificó este sábado para la final de la National Women’s Soccer League (NWSL) tras derrotar en la tanda de penaltis al vigente campeón, el NJ/NY Gotham, en un partido de infarto que las locales empataron (1-1) en el tiempo añadido.
La guardameta del Spirit, Aubrey Kingsbury, se convirtió en la auténtica heroína de la semifinal al detener los tres primeros lanzamientos del Gotham y llevar a su equipo a su primera final desde el 2021, que se disputará el próximo sábado en Kansas City. El rival del Spirit en la final saldrá de la semifinal de este sábado entre el Orlando Pride y el Kansas City Current.
El Gotham, entrenado por Juan Carlos Amorós, quiso aprovechar el tibio arranque del Spirit. Los primeros 10 minutos del duelo se jugaron en el campo del Washington, con varias ocasiones de peligro para las visitantes.
Esther González, a los pocos segundos del pitido inicial, tuvo la primera con un disparo con efecto que fregó el travesaño de Aubrey Kingsbury.
Un contragolpe dirigido por Trinity Rodman por la banda rompió a los 10 minutos esa avalancha del Gotham, que no volvería a ver puerta en todo el primer tiempo.
En ese ataque, Rodman se la dejó a la colombiana Leicy Santos, que disparó desde el punto de penalti a las manos de Ann-Katrin Berger, en la mejor ocasión de Washington en todo el primer tiempo.
Aunque el Spirit hizo un buen trabajo de contención para impedir las ocasiones del Gotham, las visitantes plantearon un duelo físico, cerrando espacios y con una marca sobre Santos que a los 23 minutos ya les había costado dos amonestaciones. La colombiana se había ganado la titularidad tras ser clave la semana pasada en la clasificación del Spirit para semifinales.
Kingsbury fue determinante en todo el encuentro: en el minuto 32 salvó el 0-0 en un mano a mano con González, mientras que la construcción del Spirit pasaba por las botas de Santos y Rosemonde Kouassi, más libre que Rodman.
El Spirit salió al segundo tiempo a la ofensiva, creando peligro sobre todo a través de Kouassi. Pero igual que le pasó el fin de semana pasado en los cuartos de final contra el Bay FC, el Gotham aprovechó ese paso adelante para tomar ventaja.
Fue la granadina Esther González, que remató de cabeza un centro de Yazmeen Ryan que dejó de piedra a Kingsbury para el 0-1 del Gotham en el 56.
Con el marcador en contra y el paso de los minutos, el Spirit se fue volcando cada vez más en ataque, pero topó una y otra vez con un Gotham muy bien organizado y en última instancia con Berger, que sacó todo lo que le llegó.
Al Spirit le llegó el premio a tanto esfuerzo en el añadido, en un tiro libre desde el borde derecho del área. Era el minuto 93 y en el estadio pesaba la sensación de ‘ahora o nunca’. Makenna Morris puso el centro que remató de cabeza a la escuadra Hal Hershfelt en un estallido de euforia que mandaba el partido a la prórroga.
Bruninha dejó al Gotham con diez en el primer tiempo de la prórroga tras recibir su segunda amarilla. Cerca estuvo el Spirit de aprovechar la superioridad numérica con un disparo de Ashley Hatch en el 103 que sacó Berger con una mano providencial cuando el Audi Field ya celebraba el gol.
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Pero con el partido roto, fue González la que tuvo dos ocasiones de oro para el Gotham a pocos minutos del final. Primero un uno contra uno que Kingsbury desvió a córner y después en un remate de cabeza en ese córner que la guardameta volvió a mandar a tiro de esquina.
Sin goles en la prórroga, el partido se fue a los penaltis, en los que Kingsbury confirmó su condición de jugadora de la semifinal, parando los lanzamientos de González, Zerboni y Nighswonger, mientras que los goles de Hatch, Silano y McKeown daban el pase al Spirit.
Casi seis meses después de ganar la Liga de Campeones con el FC Barcelona, Giráldez tiene otro título al alcance de la mano esta vez con el Spirit.
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