Hay jugadores cuyo valor para los aficionados no depende de colores, creencias, historia o pasado. Andrés Iniesta, David Silva, Villa, Kroos, Özil, Kanté… Son futbolistas que tienen apoyo allá donde van y los hinchas obvian sus colores para apreciar lo bonito de su fútbol. Al fan medio del balompié le pasa también con Ángel Di María.
‘El Fideo’ ha sido un futbolista modélico durante toda su carrera. Sin sobrepasar ninguna línea roja, el extremo argentino ha sido respetuoso y educado dentro del campo, limitándose a jugar a fútbol, que es lo que mejor sabe hacer. Lejos de excentricidades y de lujos, el obrero del regate ha levantado a propios y ajenos de sus asientos y ha deleitado al fútbol mundial a través del engaño y de la finta.
Di María ha dominado muchos registros durante su carrera. La explosividad de sus inicios ha sido sustituida con la perfección del regate en los últimos años, convirtiéndole en un futbolista impredecible. Así, pese a su edad, ha conseguido adaptarse a un fútbol que cada día evoluciona más hacia el músculo y deja de lado el talento innato que tienen los futbolistas que se criaron en la calle, en el potrero.
Los detalles han sido magníficos durante toda su carrera. Preciso en el dribbling, concreto en el autopase y sumamente correcto en el centro, Di María siempre ha sido un futbolista coral. Pese al potencial de su talento individual, ha sido un futbolista sacrificado que le ha regalado siempre un plus a sus equipos. No siempre lo ha hecho a través del gol, pero ha sumado mucho valor desde la asistencia.
El ‘Flaco’ ha deleitado a los aficionados desde su debut en Rosario Central hasta su llegada al Benfica. Uno de esos futbolistas por los que pagarías una entrada. Por los que irías a un campo de fútbol expresamente. Una actuación, una pieza de arte en el 100×60 que el fan del deporte rey ha disfrutado durante muchos años.
No dejes de inventar
A sus 36 años, Ángel Di María sigue creando. Sigue deleitando. Sigue haciendo lo que mejor sabe hacer: obligar a los aficionados a despegar su asiento del asiento, levantarse y aplaudir el talento. Este pasado fin de semana, el futbolista del Benfica volvió a firmar un hat-trick en 18 minutos en su encuentro de Taça de Portugal frente al Estrela da Amadora.
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Por eso, Ángel, nunca dejes de inventar. Sigue siendo ese pequeño diablo que creció en Rosario y cuyo fútbol tiene tintes de calle, de juventud, de pícaro, de potrero. Sigue siendo atrevido. Sigue descarando y sigue siendo la alegría para el aficionado al fútbol.
Cuando se retire, Di María será valorado como uno de los mejores futbolistas de Argentina. Vencedor en dos ocasiones de la Copa América y con un Mundial en su haber, el ‘Flaco’ ha demostrado pertenecer y liderar a una de las generaciones más prolíficas del fútbol hispanoamericano. Que siga siendo así.
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